En menos de media década los ambiciosos planes de electrificación de muchas marcas se vinieron abajo, ya sea por cambios en las políticas internas de sus países o regiones, o bien, por la baja demanda que ha experimentado este mercado en los últimos dos años. La víctima más reciente es la Ford F-150 Lightning, que oficialmente terminó su producción.
Hace meses, la primera pickup 100% eléctrica de Ford tuvo que pausar su producción debido a la baja demanda, que acumulaba unidades en los playones de los distribuidores en Estados Unidos, y sin un cambio pronto en esta situación, se optó por finalizar su fabricación y pasar hacia otra variante de la electrificación automotriz, que quizá la hará más exitosa.
Al mismo tiempo que se anunció el adiós de la Lightning, la firma del óvalo azul confirmó que ya trabaja en el desarrollo de una nueva camioneta de trabajo electrificada, que será lanzada al mercado con un tren motriz mal llamado eléctrico de rango extendido, es decir, híbrido donde el motor de combustible trabaja solo como generador de corriente.
El plans sería colocar baterías de menor tamaño, lo que reducirá el costo de producción y el peso de la pickup, además de eliminar la ansiedad de los conductores por la posibilidad de quedarse sin autonomía.
