
FIAT le dio un giro inesperado a la sustentabilidad automotriz: con el lanzamiento del nuevo Grande Panda, la marca italiana se convirtió en el primer fabricante en utilizar envases de bebidas reciclados como parte visible del interior de un vehículo.
El material clave se llama PolyAl, una mezcla de polímeros y aluminio recuperados de envases como los Tetra Pak. Cada Grande Panda integra componentes equivalentes a 140 envases reciclados, que son aplicados en la consola central, el tablero y los paneles de las puertas. El compuesto reciclado utilizado, llamado Lapolen Ecotek, es fabricado por Lapo Compound, y fue desarrollado especialmente para cumplir con los estándares de FIAT, tanto en precio como en calidad.
Quizás lo más interesante es que FIAT no trata de "esconder" estos materiales, sino que la marca quiso que estuvieran a la vista para mostrar su aporte estético y su viabilidad industrial.
El "brillo metálico" que se aprecia en algunas piezas viene del aluminio reciclado, y fue ajustado a la perfección para combinar con un tono azul específico solicitado por la marca.
La innovación de FIAT no solo responde a una tendencia ecológica, sino que también se adelanta a las futuras regulaciones de la Unión Europea, que exigirán que al menos el 25% de los plásticos en vehículos nuevos sean reciclados. La colaboración con Lapo Compound demuestra que ese objetivo no solo es alcanzable, sino que puede integrarse sin sacrificar diseño ni funcionalidad.
Test Drive FIAT Fastback
